jueves, 9 de octubre de 2014

SÓLO DIOS Y SANTA MARÍA DE LA PAZ SOSTIENEN A ESTE PUEBLO




Luis Eduardo Bastidas
Comunicador en Potencia
 


Fotografía de Jaime Pérez
En medio de una espesa niebla Trujillo se yergue cumpleañera en sus 457 años. Con el orgullo lastimado por la desidia de quienes administran el progreso de este lar de María Santísima me atrevo a escribir estas líneas cargadas, en todo caso, de impotencia. Edificios en ruina, viejas casonas devastadas por el tiempo, calles y avenidas llenas de escombros y basura, monumentos prometidos desde hace tres y hasta más años que no terminan de levantarse y una comparsa protocolizando como siempre los actos de rigor. Ese es el escenario.

¡Ah rigor! diría yo.

Ya comienzan a caer las primeras gotas de lluvia, quizá sea mejor así para que nadie pueda encender las velas de la torta (que hace un buen rato pusieron) o las mechas de los cohetes. Es mejor así. 

Y saltan las interrogantes: Cuánto nos cuesta esto a los trujillanos. Cuánto tiempo más vamos a esperar por el inicio y por la culminación de obras de interés general. Cuándo será que en los centros médico-asistenciales de la ciudad habrá insumos de primera necesidad. Cuándo le devolverán la potencialidad de Ciudad Capital a Trujillo. Cuándo se encenderá Trujillo nuevamente como esa Luz de Los Andes.

Ciertamente, sólo Dios y Santa María de La Paz sostienen a este pueblo.
EL CONTENIDO DE ESTE BLOG ES AUTORÍA DE LUIS EDUARDO BASTIDAS