viernes, 26 de junio de 2015

¡ENTRE PERIODISTAS TE VEAS!



Luis Eduardo Bastidas
Comunicólogo
-como me llama un buen amigo-

Para mí el mes de junio viene con dos efemérides especiales, en fecha 6 se celebra en el país el Día del Trabajador de La Radio, y en fecha 27 el Día del Periodista, ambas estrechamente relacionadas con lo que me gusta hacer.

En la acostumbrada celebración del día del periodista, tuve la oportunidad de compartir con una buena cantidad de amigas y amigos trabajadores de la comunicación en el estado Trujillo, no todos pero si un buen grupo de ellos.

Al final de los actos protocolares de rigor; misa, ofrendas florales al padre de la patria y entrega de premios, el ejecutivo regional tenía preparado un agasajo para los periodistas galardonados, para los que postularon sus trabajos pero no fueron premiados y para todos los que trabajan en el sistema de comunicación del gobierno.

El orador de orden para esta ocasión fue Francisco Graterol Vargas, quien se dio un paseo por sus vivencias en el oficio periodístico, cargadas de desatinos y malos chistes que no dejaron nada, al menos para mí, que se pueda aprovechar como aprendizaje en una labor tan seria como es la de comunicar.

En sus palabras, el gobernador del estado Henry Rangel Silva exhortó a los periodistas institucionales a ser más objetivos y dejar de un lado las adulaciones “porque las personas pasan, los gobiernos pasan; pero la historia queda”.

En cuanto a la metodología para la escogencia de los ganadores del premio regional de periodismo, debería ser una selección desde el seno de la institución que en efecto es el “Premio Regional de Periodismo”. Veo oportuna la fecha para proponer que en lo adelante la institución “Premio Regional de Periodismo” se encargue de “NOMINAR” a los comunicadores por sus producciones individuales o en equipo para posteriormente evaluarlos y, valiéndose de herramientas tan en boga como la redes sociales, permita que sus lectores, escuchas y televidentes participen en la escogencia de los mismos. Parece una locura pero según informaciones de muy buena fuente, han quedado por fuera excelentes trabajos por no presentar uno de los documentos que deben consignar para acompañar sus producciones y allí es donde me pregunto, qué es lo que se evalúa, el papeleo o los trabajos periodísticos.

A fin de cuentas culminé celebrando esta jornada con un par de buenas profesionales en un Ristorant comiendo pizza y compartiendo confidenciales propias de la carrera.

Desde hace diez años vengo sosteniendo una especie de concubinato con la profesión en espera de una buena oportunidad para academizarme y obtener el título de comunicador social, son muchas las experiencias enriquecedoras que en el transcurrir del tiempo he disfrutado, tantas que hasta me hacen olvidar los tragos amargos en el desempeño laboral.

En este día nacional del periodista rindo tributo a todos de quienes he aprendido algo de la carrera, a los que a diario comparten conmigo, a los que leo, a los que oigo, a los que veo; todas y todos son motivo de inspiración para seguir adelante.

Finalmente parafraseando al juez italiano Giovanni Falcone, quiero seguir diciendo la verdad en voz alta y caminando con la cabeza erguida para morir sólo una vez.

jueves, 9 de octubre de 2014

SÓLO DIOS Y SANTA MARÍA DE LA PAZ SOSTIENEN A ESTE PUEBLO




Luis Eduardo Bastidas
Comunicador en Potencia
 


Fotografía de Jaime Pérez
En medio de una espesa niebla Trujillo se yergue cumpleañera en sus 457 años. Con el orgullo lastimado por la desidia de quienes administran el progreso de este lar de María Santísima me atrevo a escribir estas líneas cargadas, en todo caso, de impotencia. Edificios en ruina, viejas casonas devastadas por el tiempo, calles y avenidas llenas de escombros y basura, monumentos prometidos desde hace tres y hasta más años que no terminan de levantarse y una comparsa protocolizando como siempre los actos de rigor. Ese es el escenario.

¡Ah rigor! diría yo.

Ya comienzan a caer las primeras gotas de lluvia, quizá sea mejor así para que nadie pueda encender las velas de la torta (que hace un buen rato pusieron) o las mechas de los cohetes. Es mejor así. 

Y saltan las interrogantes: Cuánto nos cuesta esto a los trujillanos. Cuánto tiempo más vamos a esperar por el inicio y por la culminación de obras de interés general. Cuándo será que en los centros médico-asistenciales de la ciudad habrá insumos de primera necesidad. Cuándo le devolverán la potencialidad de Ciudad Capital a Trujillo. Cuándo se encenderá Trujillo nuevamente como esa Luz de Los Andes.

Ciertamente, sólo Dios y Santa María de La Paz sostienen a este pueblo.

viernes, 23 de mayo de 2014

SALUDOS ETIANOS



Luis Eduardo Bastidas
Comunicador en Potencia

Aunque ya la campana no está en su sitio original, sigue siendo un ícono de grata recordación. Hace escasos dos días me di un paseo por grupo de Facebook que reúne a la comunidad etiana y afloraron en mí una serie de recuerdos. Aun cuando no concluí allí mis estudios, fueron tiempos de mucho compañerismo y aprendizaje. Como otros lo han hecho, aquí les va mi listado y anecdotario de recordad@s, algunos con sus nombres completos, otros con sus apodos: Joel Quiroz, Miguel Francisco Capozolli, Jesús Africano, los hermanos Marianela y Domingo (Apá) Perdomo, José de la Cruz "CHISPA E' FORORO". El gordo Durán y El Catire que vivían en El Prado; había otro amigo que le llamaban “Manchita” por un lunar que tenía en el rostro, hace un buen tiempo nos encontramos -al parecer tiene problemas con la bebida- igual me recordó, incluso me dijo que tenía un distintivo de la ETI con mi nombre al reverso. Seguro recuerdan que el Sr. Padula no dejaba entrar a nadie a la institución si no portaba su distintivo y su carnet; otra que no recuerdo su nombre era una extraordinaria voleibolista apodada “La Cachorra” que junto a Raquel no le daban vida a los demás equipos femeninos en esta disciplina. También estaba Clara, una flaca alta, esbelta, que dejaba sin aliento a mi compañero de estudios Rubaid Colmenares y a otros tantos más, aunque ella jugaba en los equipos de cuarto o quinto año.
Continuando con el listado, se me viene a la mente Danny Castellanos y su primo Javier, a quien llamaban “Pulido”; también estaba otro Danny, éste de apellido Aguilar, un taco en todas las áreas, luego lo vi de Hippie, no supe más de él. Igual viene a mi mente la ya desaparecida, Rosamel Valecillos, inolvidable amiga desde mucho antes de la ETI, paz a su alma. Con su peculiar nombre y apellido, Lord & Franz Rengifo Sáenz, (ojalá este bien escrito) conocido en gradas y pasillos por su grito “FAMILIA” -ojo nada que ver con Vallenilla, esto fue mucho antes-. Cómo no recordar a Nora Teresa Rivas Rivas, excelente amiga y la única que me brindaba Sándwich de “CINCO BOLOS” en  la cantina. ¡A Rigor! uno martillaba de a medio (0,25 céntimos) en gradas, pasillo y canchas, para desayunar y para comprar helados de coco en la urbanización "Barreto y Uzcategui" al salir de clase.
Igual recuerdo a Leonel Ruíz, actual alcalde de Pampanito, quien se destacaba bailando Break Dance en los espacios de la ETI, junto a Reinaldo López (hoy Sub Inspector de Poli-Chacao), José Martínez, Esteban Daboín (músico), Yanet Morales (La Pequeña Lulú) y su hermana Olga, Ana Teresa (la narizona) y quien escribe (Comunicólogo como recién me bautizó un amigo). Una vez mi papá le dijo a mi mamá “ese muchacho como que está fumando vainas raras, lo vi en el Centro Comercial Don Pedro retorciéndose con una cuerda de vagos”. También eran de Pampanito, Castillo, “EL TARTAMUDO”, éste destacaba tocando el cuatro y sorprendía con su -fluido- cantar y Junior que hasta hace unos pocos años fungía como promotor de la CocaCola. Igual compartí clases con otro chamo que le decían “El Indio” habitante de Tres Esquinas. Había un estudiante de mecánica, creo, con limitaciones motrices, Arcadio, si mal no recuerdo, tenía un dichito pegajoso, algo así como: ¡Ah Samadre!  
De la rama profesoral recuerdo con especial afecto al viejo Páez, impartiendo desde un pupitre sus clases de educación física con aquellos pesados balones medicinales forrados en cuero, el plinto, trampolines, colchonetas y demás aparejos para la práctica y entrenamiento gimnástico al ritmo de los pitazos de “Paíto”, como le llamábamos de cariño. El profesor Tulio Núñez, con su particular carro Nova color naranja, Gloria Ojeda la del Renault Negro, Tirzo González y sus @#¬_@|#ª#¬ Polinomios, Ylse de Briceño y Carmen Belandria en biología, el Prof. Pompeyo en taller de Madera, Oswaldo Núñez el teacher de 2do año, Esperanza Mora también me dio clase en 2do pero no recuerdo que materia. Mi tocayo, Luis Bastidas, con sus divertidas clases de matemática. Un excelente amigo: Reinaldo “El Gato Rey”, gracias a él superé los @#¬_@|#ª#¬ polinomios de Tirzo, al igual que el profesor Rafael Álvarez, entonces coordinador de talleres, excelente consejero. Cuando inicie mis estudios allí era director el profesor Africano, al momento de retirarme lo hacía Cecidio Vallera.
De las modas de la época, la década de los 80, denominada “La Era del Color”, recuerdo los sweaters de capucha, más pavos si no tenían cierre, los chinches pintados con tinta china que se usaban como prendedores, cuánta creatividad en sus diseños. La ropa “de marca”, na’ guará, vestirse era un lujo, pantalones: Levis 501 de jean o de pana; zapatos: Nike, Adidas Stan Smith, Pony, Vans; franelas Op, Fred Perry, Lacoste; accesorios como Bandanas, Relojes Benetton. El que tuviera un walkman era lo máximo y si tenía un casette de 90 minutos, calidad cromo, full Break Dance, para qué les cuento.
Finalmente, deje la ETI y me fui a otras instituciones. Cosas del destino. De haber egresado de allí pertenecería a la promoción del 88 en la especialidad de Electricidad. así que, si alguno de ustedes es de la misma o de otra de esa época, le causará mucho agrado lo que acabo de rememorar y algunas otras cosas que espero compartan en sus comentarios.
Grande, la otrora Escuela Técnica Industrial “Laudelino Mejías”.
Grandes, los hombres y mujeres formadores y formados en sus aulas y talleres. 
Mis respetos.

sábado, 29 de junio de 2013

AMORES PERROS

Luis Eduardo Bastidas
Comunicador en Potencia



Regularmente me doy un paseo por los hashtag del twitter y cada vez me sorprendo más con las barbaridades que se registran, tal vez por desconocimiento de los usuarios de esta red social cibernética, digo, tomando en consideración que quienes utilizan estos medios en su mayoría son jóvenes que poco deben haber vivido de la época anterior a Chávez (1998).
Yo que estoy contando los cuarenta y dos, viví veintiocho de los cuarenta de la cuarta, y jamás en esos tiempos comí alimentos para perros. Por qué tendría que hacerme eco de algo tan fuera de lo común. Si bien existe una publicación que apunta a una consideración de un vendedor que especula diciendo:
La pregunta ante el mostrador fue directa:
—Los clientes les están comprando más Perrarina. ¿Le consta que se la coman?
—Lo que sé es que no tienen perro.
Y aún más las apreciaciones del vicepresidente de relaciones institucionales de la empresa productora de este tipo de alimentos apuntó: “se ha dicho que la gente está comiendo Perrarina, y también se ha dicho que nuestras ventas han aumentado debido a esto: pero no puedo dar cifras que relacionen el crecimiento con nuevos tipos de consumo de Perrarina”   
También hay estudios que reflejan cuáles eran los precios de la carne en el año 1989, los cuales estaban por el orden de los 68 bolívares el kilogramo y el salario mínimo era de 100 mil bolívares.
fuente: http://www.scielo.org.ve/scielo.php?pid=S0798-72692007000300010&script=sci_arttext

 Ahora bien, cabe preguntarse: ¿En una situación desfavorable como la que vivimos los venezolanos con las medidas económicas del finado presidente Carlos Andrés Pérez en el año 1989, al final de la fatídica y renombrada época de la cuarta república, y la que se está viviendo ahora en la quinceañera pubertad del proceso revolucionario fundado por el también finado presidente Hugo Chávez, usted como madre o como padre sería capaz de alimentar a sus hijos con alimentos para animales?
Más allá de la certeza o no del hecho me permito apelar a la conciencia de las madres y de los padres, por eso la pregunta. Yo sería incapaz de hacerlo.
Si bien es cierto en las postrimerías de la llamada cuarta república Venezuela pasó por un terrible momento en su economía y sufrió una cruenta devastación en el seno de su sociedad, los venezolanos no somos personas que se amilanan ante situaciones adversas, por el contrario nos crecemos y buscamos las soluciones pertinentes a cada problemática. Hoy vivimos una etapa quinceañera, por lógica inmadura, de nuestra vida política, donde no se sabe si estamos en democracia o no, sin embargo el gobierno pretende hacer parecer que estuviéramos viviendo en el paraíso, el salario mínimo en relación a los estándares mundiales retrocedió dos años, los precios de los productos pareciera que avanzaron igual cantidad de tiempo, el sueldo no alcanza para nada y es precisamente nada lo que se consigue en los anaqueles de los comercios.
No obstante, igual que en otrora, no veo la posibilidad de que una madre o un padre, alimente a sus hijos con comida para animales. Es rotundamente inadmisible. Y ya saldrán algunos diciendo que para eso fue creada la misión alimentación, que mercal y pdval ofrecen los productos de la cesta básica a precios solidarios. Muy cierto, pero no hay libertad de escogencia, además hay que calarse largas colas, donde te enumeran, para comprar las cantidades que te quieran vender. A eso le sumamos lo que algunos vendedores de estos productos ya comienzan a denunciar que es la falta de ganancias y libertad para negociar con otras empresas distribuidoras de alimentos a fin de ofrecer variedad en sus anaqueles.
Para culminar estimados lectores, no se trata de comer perrarina, pero tampoco de fomentar unos Amores Perros.
 ¡C'est fini!
EL CONTENIDO DE ESTE BLOG ES AUTORÍA DE LUIS EDUARDO BASTIDAS